Como buenos ciclistas de montaña, hemos seguido escalando cimas en COTC.
Tras nuestra cima 1, en que el nuestra presentación personal y el impacto emocional inicial han situado a nuestros oyentes en el punto óptimo de atención, nos encontramos por delante, en primer lugar, las cimas de los epígrafes que hemos seleccionado para nuestro discurso.
Estamos en el tiempo de exposición. Ayudados por los "amigos" que hemos decidido que nos acompañen, damos información y, sobre todo, comunicación. Es decir, enfatizamos, con todos los medios a nuestro alcance, la importancia de los puntos que estamos tratando, su soporte teórico y experimental y su importancia relativa.
Cada epígrafe, cada subtema, requiere de una "introducción" efectista, y hemos de currarnos esos efectos. No es sencillo. La preparación de una charla es un asunto largo y complejo, no solo por los trabajos científicos previos, sino por esa búsqueda de efectos adecuados.
El nivel melodramático de los mismos dependerá, naturalmente, del contexto y de los públicos objetivo a que nos dirigimos, pero su necesidad deriva de la lucha contra la curva fisiológica a la que nos enfrentamos.
Por fin, hemos acabado esta importante fase del discurso. Los datos están sobre la mesa. ¿Para que nos han servido?
Comienza el tiempo de conclusiones. La sola mención de que vamos a concluir, eleva ya el interés del auditorio. Psicológicamente, la sensación de que algo puede haberse perdido, prepara al oyente a prestar atención a las conclusiones. Enumerémoslas, pues, destacando su lugar orgánico en el discurso y sin olvidar resaltar su importancia relativa. Nuevos efectos melodramáticos y nuevas cimas en la atención de nuestros oyentes.
Por fin, terminado el tiempo de conclusiones, comienza la parte más importante del discurso: el "tiempo de finalización".
El tiempo de finalización se compone de dos partes bien diferenciadas, la conclusión final y el efecto emocional humano que llevará al auditorio a esa emoción final que provoca el aplauso. Hay que preparar bien, por tanto, esos efectos.
No es fácil, al menos al principio. Hay que reflexionar, ensayar y volver a ensayar, sin público y con público, hasta que nos quede natural el contenido del discurso, hasta que parezca completamente procedente en la situación de comunicación que estamos diseñando: objetivos de comunicación, públicos objetivo y medios de comunicación.
Con esto terminamos el análisis de la curva de atención ideal. Ya tenemos una estructura para nuestro discurso. Pero no termina ahí la cosa. No. Casi comienza el acto de comunicación!
¿Y porqué? Ya hemos decidido los hitos del discurso, ya hemos encontrado los
efectos melodramáticos adecuados a cada parte... Ahora hay que llevarlos a la escena!
Un nuevo tema comienza. La escena! El lenguaje verbal y el lenguaje no verbal. Eso tan difícil que es... el dominio de la escena.
De eso hablaremos el próximo jueves, que el martes no hay clase! El profe está en Portugal juzgando una actuación académica!
En DPTIC los temas han sido más técnicos, esta vez. Hemos concluido el análisis de la bibliografía y hemos introducido el importante concepto de "bibliografía complementaria", que permite al autor descargar al aparato crítico de citas bibliográficas menos específicas.
En el proceso de simplificación de la literatura científica que vivimos, la bibliografía ha pasado a cumplir funciones, no solo de fundamentación del trabajo científico, sino de evaluación de los autores de esos fundamentos en que nos hemos apoyado. La bibliografía, las "references" deben reducirse a lo esencial para inscribir nuestro trabajo en el proyecto global de investigación en que nos situamos.
De ahí vive el Science Citation Index. El SCI es, actualmente, el más utilizado instrumento de evaluación de la importancia de un determinado trabajo científico entre los que usa la comunidad internacional. Comprender su necesidad, funcionamiento y consecuencias es un elemento importante a la hora de abordar nuestro propio trabajo científico y el análisis del de los demás.
Junto al índice de citas, la comunidad científica internacional ha creado otro instrumento, complementario en cierto modo, que permite perfilar más la importancia de una determinada referencia, el índice, o factor, de impacto, más asociado a los medios que a su contenido concreto en cada número, pero que sirve también para establecer un ranking académico en el mundo científico.
Esto de las citas bibliográficas tiene más enjundia de lo que parecía!
Abordado el análisis del apartado bibliográfico, hemos comenzado el estudio de otros elementos de apoyo al lector de nuestro trabajo. Los siguientes puntos son eso, apoyos que ofrecemos a nuestro amable lector, al público objetivo a quien nos dirigimos.
Efectivamente, tanto el léxico como el apéndice biográfico, que hemos comenzado a analizar, son dos instrumentos que dependen, esencialmente, del nivel de nuestro público objetivo. Estudiando públicos y niveles nos hemos quedado. Hasta el jueves!